dreams burn but, in ashes, are gold.



martes

fragmentos de una vida y en el instante de gracia

fragmentos de una vida

y en el instante de gracia,
nos conocimos
mientras guitarras sonaban
profundas disonantes y
mis elecciones no son más
que azarosas
puedo elegir la palabra
Mundo
y referirme a las ninfas
escondidas por debajo de
La tierra, mundo
y encontrar en la esperanza
un pequeño grillo,
lo único que aleja
del sopor de las ciudades
¡mundo! entre sonidos
Urbanos, era sólo cuestión
de levantar la cabeza
y mirar más allá del cósmos
mirar sin entender muy bien
esa música, era cuestión de hablar
con las ninfas
que se esconden en el agua

haiku en septiembre

haciendo mímicas,
como si un herboriscopio
fuera el mundo.

pneuma o alma

una sola cosa no podía faltar
en la noche de la luna
su corazón lo había perdido
ya en el eclipse de otoño
hace algunos milenios,
cuando el cósmos no era más
que blanco
una sola cosa
debía encontrar para cumplir
con el ritual preestablecido
por el tiempo, los usos
las costumbres de la vía
láctea
una y nada más que una
-indecible-
lo mismo que debo encontrar
por estos días
antes de que el mundo
sea angosto.

el génesis

Creo que perdió sus manos tocando el mundo. Le pidió que esperara, que lo esperaran; siguieron avanzando a las colinas celestevioláceas. Si alguien deteníase a observar el camino, el mundo continuaba. Vivían para eso y morían en la paradoja; construían paralelos infinitos de preguntas; se inspiraban con palabras. El contenido que desborda la palabra, la palabra que desborda el sentimiento, la emoción que se disuelve en el granizo. Si tomaban su mano suave, el mundo cordial se abría como una estela, una constelación de paraísos; entonces continuaban en la lucha y volvían a vivir entusiasmados, con música o sin ella. Aferrábanse los días a las cosas y las cosas a la tierra porque ellos lo arrasaban todo: las letras, los colores, las albahacas. Creo que por esos días fue creado el hombre; y con él, su tristeza más profunda.